Decorar un apartamento pequeño encierra sus complicaciones inherentes al poco espacio disponible. Si a eso le sumamos que la decoración es para una pareja que vive por primera vez juntos, jóvenes y dinámicos con las inquietudes propias de su edad, la tarea se hace aún más complicada. Un reto que el estudio de diseño y arquitectura Int2architecture, de San Petersburgo, de Rusia, aceptó con gusto y lo resolvió con matrícula de honor, al crear un diseño interior sofisticado, práctico, funcional y extremadamente bello, que cumple a la perfección con las necesidades de los propietarios. El resultado, un apartamento de diseño nórdico de tan sólo 40 m2 digno de aparecer en las mejores revistas de interiorismo.
El apartamento carece de tabiques divisorios excepto en el baño y el cuarto de la lavadora. El resto, las zonas principales: cocina, salón y dormitorio, se combinan en un único espacio juntos pero no revueltos; ya que la decoración separa cada espacio, otorgándole intimidad sin ninguna separación física.
El salón, donde vemos que está amueblado con muebles de diseño nórdico y no le falta de nada. Sofá, mesa de centro y mueble de televisión.
Aquí vemos el salón con la vista como si estuviéramos en el sofá, desde donde se aprecia el pequeño tamaño del apartamento.
En frente del salón, a una altura diferente, se encuentra el dormitorio. En este podemos ver un práctico escritorio para dos y la cama, todo ello sobre una base a mayor altura revestida de tarima clara.
A la derecha del salón, nos encontramos con la cocina. Una cocina, naturalmente abierta, con un backsplash o frente de cocina decorado con papel pintado de diseño geométrico, el cual crea un punto focal.
Entre el salón y la cocina, se encuentra la mesa de comedor, igualmente de diseño nórdico, con un juego de sillas Eames. Junto a un tabique divisorio que se ha utilizado para crear una zona de especias, realmente envidiable.
La cocina da a una pequeña galería o terraza cerrada, en la que también podemos apreciar el gran trabajo del estudio Int2architecture.
Pequeña pero bella y funcional, la terraza cuenta hasta con un pequeño jardín vertical y unos estantes muy prácticos para guardar libros o revistas que vamos leyendo, mientras tomamos un café al sol.
Aquí vemos el plano de planta.
Aunque en esta ocasión se ha recurrido a un estudio de interiorismo, este es un gran ejemplo para ser optimistas, de lo que podemos lograr con nuestro propio apartamento, por muy pequeño que sea.