Hygge es algo que va mucho más allá de una simple palabra, es, también, más que un estado mental y anímico, más que un concepto acogedor, es algo que los daneses llevan impregnado en su ADN, algo inherente a la cultura escandinava. Descubre lo que hay detrás de esta maravillosa palabra y su implicación en la decoración de interiores, para lograr ambientes en los que se respira bienestar; acogedores, confortables, mágicos… bueno, en definitiva: hogares felices, hogares hyggelig.
Como muchas otras cosas que han cruzado las fronteras de todos los países occidentales desde los bellos países nórdicos, el concepto hygge, (se pronuncia hu-ga) también proviene de los daneses; y es normal que con el paso del tiempo, esta noción se haya expandido por todo el mundo debido a sus características.
En realidad podríamos hablar sobre lo que significa hygge durante muchos artículos, pero en esencia, hygge es una palabra utilizada por los daneses para expresar un concepto de bienestar que nos invita a disfrutar de los pequeños placeres de la vida plenamente. Una manera de vivir acogedora, dulce y cálida; hygge es lo que sientes con el abrazo de un amigo que hace años que no lo ves, o con la persona que te tiende una mano cuando más lo necesitas; hygee es una forma de vivir que, para los daneses, se extiende más allá de la decoración: es un estilo de vida que abarca sentimientos y estados de ánimo, así como sensaciones físicas. Palabras tales como intimidad, confort, calidez, acogedor y confianza entran dentro de esta manera de vivir.
Foto Pinterest
Como decía al principio podríamos hablar durante muchos artículo o incluso escribir un libro entero que tratara sobre hygge, ya que es algo muy profundo. Si os interesa aprender más sobre hygge hay muchos libros que explican qué es o con consejos e ideas para tener una vida hyggelig.
Ahora que más o menos hemos definido lo que significa este concepto tan abstracto para los daneses, veamos cómo podemos decorar nuestra casa para que sea una casa hyggelig.
En realidad, decorar la casa de esta forma no es ni mucho menos tan complicada como definirlo; básicamente se trata de crear un ambiente feliz, donde podamos disfrutar de las pequeñas cosas de la vida junto con nuestros seres queridos. Veamos algunas fotos de decoración hygge para cargarnos de inspiración.
Foto Urban outfitters
Foto Alexande White
Fotos Decoesfera
Foto Free People
Después de ver la definición de hygge y algunos ejemplos gráficos muy esclarecedores, veamos ahora algunos consejos para una decoración hygge.
Rodéate de velas.
Las velas son acogedoras y cálidas y crean ambientes en consonancia. Son económicas y las tenemos disponibles de infinitas formas, colores y olores, por lo que podemos encontrar las que mejor se ajusten a nuestros gustos. Mira si son importantes las velas para crear un momento hygge que la firma Skandinavisk ha sacado unas velas hygge que evocan estos momentos. Podéis comprar esta vela aquí.
Añade una sutil y acogedora fragancia.
Sé que está algo rebuscado llamar acogedor a una fragancia, pero los momentos hygge tienen esa calidez acogedora que la fragancia debe de estar en consonancia. Para explicarlo mejor, la misma firma Skandinavisk, ha creado una fragancia difusora para el hogar llamada hygge, con aroma a té, pastel de fresa al horno y menta silvestre. La definen como la fragancia que lleva el ADN de Dinamarca.
No es imprescindible, pero un aroma sutil y embriagador, ayudará a crear una atmósfera más hygge: el aroma de las galletas o el pastel en el horno o el café y el té recién preparados…
Añade textiles cálidos y con textura al hogar.
Si pensamos en un hogar cálido y acogedor, inmediatamente nos viene a la mente cálidas y suaves mantas así como mullidos y peludos cojines. Estos complementos nos ayudan a crear esa atmósfera hygge en nuestra casa, haciéndonos sentir más cómodos y creando un entorno más acogedor, especialmente en inverno, claro está.
foto ShutterStock
Rodéate de seres queridos.
Con amigos y familiares hygge se disfruta mejor, se termina de completar. Una bonita noche de invierno en un entorno cálido y acogedor, al lado de la chimenea, comiendo y bebiendo deliciosas recetas dulces o también vino, con amigos, en un ambiente distendido y lleno de amabilidad… hygge.
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Olvídate de las prisas.
Como te has podido imaginar, las prisas y el estrés no encajan de ninguna forma en un ambiente hygge. Frena un poco, ya pensarás en otro momento, éste dedícatelo a ti y a los que te rodean y disfruta plenamente de la taza de café o de la conversación con tus seres queridos. De nada sirve aplicar los anteriores consejos si vamos estresados y con intención de pasar a la siguiente cosa, como siempre hacemos. Simplemente permítete estar.
Disfruta de lo que te rodea.
En un entorno hygge también se disfruta de lo que te rodea, por ello se da tanta importancia a escoger elementos que cumplan determinadas funciones como las velas, o los cálidos textiles. Rodéate de cosas agradables no sólo para embellecer la estancia, sino para disfrutarlas, pues si no, de nada serviría.
No te excedas.
Todo en exceso es malo, hasta el hygge; bueno, si es excesivo, no es hygge. Ni la decoración, ni la música, ni la fragancia o la comida y bebida debe ser exagerado, todo en su dosis justa, sin sobrecargar ni saturar nada.
Y por último y también más importante, recuerda que hygge se basa en disfrutar de las cosas simples de la vida.
foto ShutterStock
Tu bebida favorita, esa canción que te pone los pelos de punta, el aroma que te evoca recuerdos felices… son estas pequeñas cosas las que crean, no sólo un momento, ambiente o decoración hygge, sino, una buena forma de disfrutar de la vida, o dicho de otra forma, una vida hyggelig.
¿Te unes a esta tendencia para tener una casa más feliz y acogedora? Cuéntame qué te parece; te leo en los comentarios.
Foto de portada: ShutterStock
