¿Vives de alquiler y tienes una cocina sosa, aburrida, fea o sin estilo? Muy probablemente no esté como a ti realmente te gustaría tener tu cocina decorada y entre los algunos inconvenientes que tiene vivir de alquiler, se encuentra, muchas veces, el de no poder personalizar ni decorar cada estancia de la casa, en este caso la cocina, como quisiéramos.
Pero eso no es motivo, ni mucho menos para dejar de poder añadir estilo y nuestro propio toque decorativo a la cocina. Es cierto que hay limitaciones, pero también tenemos muchas opciones decorativas, que vamos a ver a continuación, con las que poder decorar la cocina del piso de alquiler donde vivimos, sin molestar al casero y que cuando nos vayamos, las podamos retirar fácilmente y con un mínimo esfuerzo sin dejar rastro. Veamos estas ideas y soluciones para decorar una cocina de alquiler.
Empecemos por las paredes.
Fotografía Minnete Hand
Si las paredes están revestidas en azulejo, no las podemos pintar, aunque el casero nos dejara pintarlas. Pero sí podemos añadir vinilos decorativos pequeños, en forma de puntos, por ejemplo, como vemos en la imagen de arriba de estas líneas, para crear un bonito patrón decorativo que revista las paredes. Además, si los azulejos son antiguos, disimulará su desfasado estilo, haciendo que nos fijemos más en los vinilos que en los azulejos.
El que dice pegatinas de puntos, dice pegatinas o vinilos de cruces, de triángulos o vinilos más grandes que casi ocupan una pared.
Si el vinilo es pegado sobre azulejos, retirarlo es de lo más sencillo y, si se queda algún resto de pegamento, con un poco de papel humedecido en disolvente saldrá a la primera. Tardaremos 5 minutos en despegar el vinilo y dejar la pared tal y como estaba; bueno algo más de 5 minutos, pero merece la pena, ¿o no?
Si las paredes son de yeso también podemos pegar los vinilos.
Precioso vinilo minimalista para la cocina de LoveVinilos
Es cierto que luego al quitar el vinilo probablemente despeguemos la pintura vieja, pero con enmasillar un poquito y volver a darle un par de manos de pintura, la pared se queda como nueva. Esta opción ya la valoras tú, si te compensa o no. Pero ten en cuenta que si pones vinilos sobre la pintura, lo más probable es que luego al despegarlo tengas que pintar.
Si la idea de los vinilos no te atrae demasiado, puedes pintar las paredes de la cocina y cuando te vayas, si al casero no le gusta el color, lo cambias.
En mi último piso de alquiler, la cocina tenía un blanco feísimo, y le pregunté a la propietaria que si podía pintar las paredes. Me dijo que sí, así que las pinté de un gris pálido muy elegante. Cuando me iba a ir del piso, la dueña vio la cocina y resolvió que no la gustaba el color. «No se preocupe, señora Carmen, que yo se lo pinto en blanco como lo tenía.» Es lo que dije e hice. Sí, tardé más en la mudanza, pero los dos años que estuve viviendo en esa casa, la cocina tenía un color con el que me sentía a gusto.
Pasemos ahora a los muebles. Y es que los muebles de una cocina de un piso de alquiler también se pueden decorar o cambiar el estilo si no nos gustan.
Con vinilos.
Como bien sabrás, hay vinilos de mil diseños diferentes. Seguro que encuentras uno que se adapte a tu decoración. Como el que vemos en la imagen de Chispum.
Para quitarlo vas a tener que hacer lo mismo que en la pared de azulejos. Es decir, muy poco.
Eso sí, si en los muebles se quedan restos de pegamento, no utilices disolvente o aguarrás para quitarlo como en los azulejos, ya que el disolvente probablemente dañe el barniz o el color original de los muebles. Costará un poquito más, pero con agua y un estropajo frotando suavemente, también sale el pegamento que se queda en los muebles.
Vinilo Aironfix.
Foto Dulceisalao
Este otro vinilo es un rollo de vinilo con muchos y muy variados acabados. Tanto en color como textura, ya que podemos encontrar vinilo aironfix con acabados mates, brillantes, con textura de terciopelo y de infinidad de colores.
Con este vinilo podemos cambiar de forma relativamente fácil el aspecto integral de los muebles de la cocina, como vemos en la imagen de arriba de estas líneas donde un vinilo aironfix cubre los armarios de madera. Aquí podéis ver y comprar rollos de vinilo aironfix.
Para quitarlo hay que tirar de él como si despegáramos cualquier otro vinilo decorativo tradicional. Si se quedan restos de pegamento, habrá que retirarlos con cuidado, utilizando agua y un estropajo.
Si tu casero te permite ir más allá. Enhorabuena, entonces tienes dos grandes posibilidades de cambiar el diseño de los muebles, ¿Cómo? Con papel pintado y pintura.
Papel pintado para decorar los muebles de la cocina de un piso de alquiler.
Fotografía Up to Date Interiors
¿Habéis visto qué cocina más espectacular? Es gracias al papel pintado que la inquilina puso en el frente de los armarios.
Seguramente, el día que haya que quitarlo tendrá que estar unas buenas horas humedeciéndolo y quitando tiras de papel, pero si el propietario le ha dado permiso…
Pintar los muebles de la cocina de un piso de alquiler.
Fotografía The 36th Avenue
Esta es la opción decorativa más radical. Aquí no hay vuelta atrás. Una vez que se pinten ese será su color por muchos años, hasta que se tiren o hasta que se vuelvan a pintar.
En este caso, naturalmente, tenemos que hablar con el propietario. Si nos permite pintar los muebles, lo mejor es llegar a un acuerdo en cuanto al color, y encontrar uno que sea un término medio para que satisfaga a ambas partes, y que cuando te vayas del piso no tengas que repintar otra vez los muebles con el color preferido del propietario.
¿Qué más podemos hacer para decorar la cocina de un piso de alquiler? Muchas más cosas.
Renovar el suelo con láminas o suelo vinílico.
Si el suelo de la cocina de alquiler es de cerámica, podemos utilizar suelo vinílico. Como ha hecho la talentosa Sandra, al instalar suelo vinílico en su cocina, encima de las antiguas baldosas. Lo vemos en la imagen de arriba. Además, ha documentado todo el proceso, y podemos ver en su blog cómo poner suelo vinílico en la cocina paso a paso. La verdad que le ha quedado una cocina preciosa y el cambio ha sido radical, ¿no os parece?
Este tipo de suelos de caucho, goma o vinílico tiene una instalación muy, muy sencilla. No es un gran suelo que nos vaya a durar toda la vida, pero sí que nos permite tener un suelo bonito y como nuevo por un módico precio y que lo puede instalar cualquiera, con un mínimo de interés, ya que únicamente hay que ir pegando baldosa a baldosa como si fueran pegatinas, siguiendo un orden concreto, realizando cortes y poniendo atención a las instrucciones del fabricante. Aquí puedes leer y conocer más acerca del suelo vinílico y cómo instalarle.
Si el suelo es de madera o ya tiene suelo vinílico, no podemos utilizar este tipo de suelo ya que cuando lo vayamos a despegar, podemos tener serios problemas, tanto con la madera como con el suelo vinílico.
Si hemos pegado el suelo en cerámica, no tendremos ningún problema, o al menos, no deberíamos tener ninguno. Basta ir tirando de las baldosas pegadas para ir quitándolas. Con algunos modelos de baldosas, puede que tengamos que tirar bastante o nos cueste más. No es por la baldosa sino por el pegamento ultrafuerte que llevan. Aún así, se pueden quitar.
Si se quedan restos de pegamento, dependiendo de qué tipo de pegamento sea, lo iremos retirando fácilmente, con agua si el pegamento es con base agua, y si no lo es, con un poquito de disolvente y un trapo, que no afectará para nada el color de la baldosa.
Sigamos con más ideas para decorar una cocina de alquiler.
Los complementos.
Fotografía @alexandra
Aquí es donde más nos podemos explayar, ya que todo lo que añadamos lo podemos retirar sin ningún problema y utilizarlo en nuestra nueva vivienda. Podemos añadir color, elegancia, simetría, o cualquier otro concepto o recurso decorativo con los complementos. Fijaros en esta cocina.
Es una cocina muy bonita, colorida y alegre, y se debe en su mayor parte, a todos los complementos que hay. Como vemos, con distintos accesorios podemos dotar a una cocina de estilo y personalidad y hacerla un poquito más nuestra.
Y no me refiero sólo a complementos decorativos típicos de la cocina como fruteros, portarollos, tazones, tablas, cuencos, o cubertería; sino también, hasta incluso los tiradores de los armarios y la grifería.
Si no nos gusta el grifo o los tiradores, los podemos sustituir por unos que compremos nosotros y cuando nos vayamos, basta con volver a poner los que estaban. Cuando quites los antiguos, guarda bien todas las piezas en cajas, y ponle etiquetas si hace falta para que luego no tengas problemas en volver a instalarlos.
Como ves, quejarse de que la cocina del piso de alquiler donde vives es muy fea y no encaja con tu estilo, es más una escusa que una realidad. Hay muchas formas, y las hemos visto, de decorar esa cocina sin molestar al casero.
Y estas ideas que hemos visto para la cocina, las podemos extrapolar a todas las estancias de la vivienda de alquiler, de hecho en Mil Ideas de Decoración ya las hemos explorado y las puedes ver en este artículo con más de 40 ideas para decorar una casa de alquiler.
Ya para terminar solo me queda hacerte una pregunta, ¿Cómo decoras tú tu cocina o piso de alquiler? Te leo en los comentarios.
Para cambio espectacular el de tu cocina. ¡Enhorabuena!
¡Desde luego que con un poco de ideas y de paciencia se pueden conseguir unos cambios espectaculares! Un besote y gracias por el post ;-)