Rediseñar un clásico no es tarea fácil, y menos aún, cuando se trata de algo tan emblemático como el diseño del sofá Chesterfield. Un diseño icónico, que se ha convertido a lo largo de los siglos, en un símbolo indiscutible del estilo clásico inglés. Aun con todo, el diseñador español Damian Calvo, ha superado con creces este arduo reto, y Mezzo, es la prueba de ello.
Sofisticado, elegante, minimalista, sencillo…, espectacular, en resumidas cuentas. Así es Mezzo, el nuevo sillón Chesterfield. Un diseño que trae consigo toda la esencia de su predecesor, adaptado a nuestros días.
El conde de Chesterfield, Philip Dormer Stanhope, a mediados del siglo XVII, encargó a un ebanista local que se hiciera un sillón, duro y robusto, que tuviera los reposabrazos y el respaldo a la misma altura, para así, forzar a sus invitados a mantener la espalda recta y una postura correcta.
Hoy en día, tal imposición protocolaria no está presente en nuestras vidas, pero aun así, el diseñador español, la ha respetado, haciendo que el nuevo sillón Chesterfield, mantenga su esencia elegante y tradicional, con los brazos a la misma altura que el respaldo; un diseño que hace, igualmente que el de su predecesor, adoptar una postura erguida, recta, correcta. Una postura a la altura del sillón que nos mantiene sentados.
Conservada y respetada su esencia y personalidad, algo que no podía ser de otro modo, Damian Calvo ha rediseñado todo el sillón: líneas depuradas y simples en lugar de complejidad; la ostentosidad da paso al minimalismo, un impensable hueco que puede servir como espacio de almacenaje, y una imagen suave y definida es lo que nos ofrece Mezzo.
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